Actividades invierno: Hacemos un árbol nevado

Esta actividad la vi hace unas semanas en un blog pero tengo tan malísima cabeza que no recuerdo el nombre...si en algún momento, vuelve mi memoria, editaré la entrada para corregir el despiste.

Lo que más me gusta de la actividad es que es muy fácil de hacer ya que, salvo el recortado, los más pequeños la pueden hacer ellos solos.

Absolutamente concentrada

Los materiales que hacen faltan son muy de andar por casa...al menos por la mía ;D

- Cartulina azul.
- Papel charol o cartulina de color marrón para hacer el tronco del árbol.
- Pompones de color blanco, algodón o pintura blanca de dedos.
- Pintura de dedos de color amarillo.
- Rotulador rojo.
- Pegamento de barra.


¿Cómo se hace?

Pues lo primero que haremos será el tronco del árbol y, para eso, lo mejor es utilizar la mano abierta del niño y siluetearla en el papel charol o cartulina marrón. Luego se recorta y ya tenemos nuestro tronco.

A continuación, lo suyo es pegar el tronco en la cartulina y seguidamente que los peques vayan poniendo las bolitas de algodón o los pompones o incluso la pintura de dedos...lo que tengáis más a mano.

Para terminar, nosotros decidimos hacer un pajarito en la rama del árbol y para eso, mojamos el dedo de Laura en pintura de dedos amarilla y la estampamos cerquita de una de las ramas; le pintamos el pico y el ojito y ¡listo! Ya tenemos nuestro árbol de invierno.

La verdad es que es una actividad que va genial tanto para desarrollar la psicomotricidad como la imaginación de los más pequeños y también para poder hablar en casa del paso del tiempo y las estaciones del año.