viernes, 13 de noviembre de 2015

Tarde de cocina: Bizcocho de moras silvestres





Ya os conté hace algunas semanas que a mediados de agosto, pasamos un fantástico fin de semana en la Sierra de Cazorla y, entre las muchas cosas que hicimos, estuvimos cogiendo moras. Cogimos muchas, muchísimas moras aunque una buena parte de ellas nos las comimos antes de llegar a casa pero, con las que sobrevivieron decidimos hacer un bizcocho para merendar.


 A mis hijos les gusta mucho meterse en la cocina para hacer bizcochos y postres y, os podéis imaginar, ellos se lo pasaron genial. La receta que os traigo hoy la hicimos con la thermomix -aunque siempre podéis hacerlo al estilo tradicional- y la saqué de la página Velocidad Cuchara. Es muy fácil de hacer y nos salió bien a la primera y eso que al estar todos metiendo mano en la cocina, durante un ratito, el caos se adueñó de nosotros.


 Ingredientes (6 raciones aproximadamente):

- 3 huevos.

- 180 gr. de azúcar moreno.

- 100 gr. de aceite de girasol.

- 1 yogurt natural.

- 300 gr. de moras silvestres.

- Una pizca de sal.

- 170 gr. de harina de repostería.

- 1 sobre de levadura.


Preparación

1.- Precalentar el horno a 180º con calor por arriba y abajo.

2.- Ponemos los huevos en el vaso de la thermomix, se añade el azúcar y programamos 2 minutos, temperatura 37º, velocidad 3.

3.- Se añade el aceite y el yogurt y se mezclan 15 segundos a velocidad 3.

4.- Se incorpora la harina, la sal y la levadura y mezclamos otros 15 segundos a velocidad 3.

5.- Echamos la mezcla anterior en un molde previamente engrasado con matequilla y enharinado.


6.- Repartimos las moras por encima de la mezcla anterior y horneamos durante 30 minutos con el horno previamente precalentado a 180º .

Yo no sé en vuestra casa pero en la mía no quedaron ni las migas, los muy ansias no esperaron a que se enfriaran del todo!



jueves, 5 de noviembre de 2015

Club de Lectura Boolino: Los cinco y el gran enigma



 Este libro lo pedí más para mí que para Carlos porque cuando era pequeña devoraba los libros de aventuras de Los Cinco...me encantaba pasar las horas muertas leyendo sin parar en la casa de mi tía. El tiempo se detenía y yo me transportaba y vivía cientos de aventuras ¡qué recuerdos! Así que cuando vi que Boolino nos planteaba la posibilidad de enviarnos un libro de Los Cinco ni me lo pensé ya que estaba convencidísima de que a Carlos le iba a encantar...¡y no me equivoqué! Literalmente devoró el libro de una sentada...sé que no es muy frecuente en niños de 8 años pero, como os he contado alguna vez, Carlos es un lector voraz aunque, a la vez, muy selecto; si algún libro no le gusta, no lo termina...sin más.

Para quienes no lo sepáis, las aventuras de Los Cinco fueron escritas por Enid Blyton, entre los años 40 y los 60 y cuenta las andanzas de tres hermanos (Julian, Dick y Anne) su prima Georgina -conocida como Jorge) y el perro de ésta, Tim, que hacen de detectives en historias que combinan el misterio y la aventura.

Nosotros recibimos el libro de "Los Cinco y el Gran enigma", publicado por la Editorial Juventud y que, como novedad respecto de textos anteriores de Blyton, tiene unas estupendas ilustraciones a todo color en todas las páginas del libro, lo que unido al hecho de que hay distintas tipografías, consigue ser un libro muy atractivo incluso para los lectores más reacios.

En esta ocasión, la aventura comienza cuando Jorge, desvelada a media noche por un dolor de muelas, ve una luz en la isla Kirrin...es una isla deshabitada así que ¿quien estaría allí? La primera intención de Jorge es ir en mitad de la noche a la isla para inspeccionarla y saber quien está allí pero, lógicamente, su padre y sus primos le quitan las ganas...irán por la mañana a reconocer la isla.

Bien temprano, Julián, Dick y Ana, deciden ir a la isla sin esperar a que Jorge regrese del dentista. Después de inspeccionar la zona los hermanos, no encuentran a nadie por allí aunque una de las zapatillas de Ana desaparece misteriosamente...¿se la habría llevado un pájaro o un conejo?

Cuando Jorge regresa del dentista, se enfada mucho porque sus primos no le habían esperado para hacer la incursión. Deciden volver porque Joana, la cocinera, les cuenta que han desaparecido algunos alimentos de la casa...¿Encontrarán a alguien o algo en la isla? ¿Tendrá alguna relación con la desaparición de la comida? Tendréis que leer el libro si queréis saber qué ocurre y estoy convencida de que os va a encantar.



martes, 3 de noviembre de 2015

Ideas Halloween: Bolsas caramelos terrorificas




Esta entrada la escribo desde la tranquilidad que da el paso de la fiesta de Halloween. Otro año más que lo hemos pasado en grande; no sé si la fiesta me gusta más a mí que a ellos pero el caso es organizar un sarao en casa para pasar un buen rato.

Aquí no hay tradición de que los niños salgan por las calles pidiendo caramelos pero es cierto que en todo Halloween que se precie debe haber bastantes chucherías así que lo que solemos hacer en casa es preparar nuestras propias bolsas de dulces para nuestros hijos y los niños que vengan seguro a casa.

Este año las bolsas las hemos preparado rellenando unos guantes de latex con chucherías varias y atándolas con una cinta o cordel. Como nosotros hacemos una fiesta para niños, solemos evitar que haya referencias a la sangre -mi hijo mayor es muuuuuy aprensivo- y aunque podíamos haberle puesto algunas gotitas de sangre falsa con pintura de uñas, preferimos dejarlos así, que también daba un poco de grima.