sábado, 29 de noviembre de 2014

Experimentos para niños: La pimienta mágica



Este experimento lo tenía pendiente de hacer con los niños desde que, hace casi un año, le regalamos a Carlos por su cumple un juego de magia Borrás y vi que aparecia como un truco.

El caso es que el pasado fin de semana que ya hacía bastante frio por aqui  -por fin!-, en un momento de sano aburrimiento mis renacuajos me pidieron hacer un experimento....y tachaaaaaan!! Decidimos hacer este experimento de la pimienta magica.

Qué vais a necesitar para hacerlo? Un recipiente, agua, pimienta  negra molida y un poco de detergente o de jabón de lavarse las manos.



La realizacion es también muy sencillita ya que de lo que se trata es de llenar el recipiente con agua -nosotros utilizamos platos desechables- y luego cubrirlo con bastante  pimienta molida.




La  "magia" hace su acto de aparición cuando mojamos el dedo o una pajita con detergente de lavar los platos ya que la pimienta se dispersa y se va a los bordes.

También probamos con jabón de manos pero la pimienta prácticamente no se movió.


Lo que en realidad ocurre es que la pimienta flota en el agua porque, aunque nosotros no podamos verla, existe una capa invisible que la sujeta  -tensión superficial-; al echar el agua, se rompe esa capa y la pimienta escapa hacia el borde del plato donde aún no ha llegado el jabón.
A los chicos les encantó y pasaron un rato de lo má
s entetenido.

viernes, 28 de noviembre de 2014

Hoy leemos: ¿Y yo qué puedo hacer?





Sin darme cuenta, de la incursión a la biblioteca de la semana pasada, me traje otro libro de Jose Campanari que se titula "¿Y yo que puedo hacer?" publicado por OQO Editora y con ilustraciones de Jesús Cisneros.

La historia trata del señor Equis que, cada mañana, leía las noticias del períodico y se iba llenando de preocupaciones...tantas preocupaciones tenía que le resultaba imposible concentrarse en los demás aspectos de su vida: trabajar, dormir.

De pronto. un día, una pregunta -¿Y yo qué puedo hacer?- se le mete en la cabeza y comienza a dar vueltas por la boca hasta que, a la mañana siguiente le salió como una bala y la vecina del tercero le contestó.

A partir de ahí, el señor Equis continúa teniendo la pregunta rondando por la boca y preparada para salir en cualquier momento de necesidad; de manera que el señor Equis fue ayudando a la gente que se encontraba a su alrededor.

Y precisamente, por hacer esa pregunta a las personas que le rodean, aunque leyera las noticias por las mañanas el cuerpo del señor Equis ya no se llenaba de preocupaciones porque sabía que tenía la pregunta en la punta de la lengua preparada para salir en cualquier momento y que siempre había alguien que le contestaba.

Lo que más nos ha gustado de la historia es el punto optimista de que, con un poquito de disposición por nuestra parte, podemos cambiar un poco el mundo que nos rodea para que sea algo más amable y ayudar a que las malas noticias que hay día tras día, nos influyan un poquito menos porque somos conscientes de que ponemos de nuestra parte para que el mundo sea un poquito mejor.


jueves, 27 de noviembre de 2014

Ya huele a Navidad: Nuestro calendario de adviento




La época del año que más disfrutamos en casa es, sin duda, la Navidad...Yo había dejado de saborearla según fui creciendo pero, gracias a mis hijos, hemos recuperado la magia de la Navidad...esa magia que no entiende de celebraciones ostentosas ni de regalos caros sino de pasar tiempo con los nuestros y celebrar que podemos reunirnos de nuevo.

Una tradición que me encanta es la de preparar un calendario de adviento para los niños para que ellos sean conscientes del tiempo que queda hasta la llegada de la Navidad. El año pasado me estrené haciendo uno con vasitos de yogures -podéis verlo aquí- y la experiencia fue muy positiva, tanto que me he animado a repetir.

Aunque en pinterest hay unos calendarios la mar de bonitos, muy sofisticados pero no era esa la idea que tenía en mente y finalmente, con la ayuda de los niños nos decantamos por un calendario sencillito hecho con sobres de colores -aprovechando la gran cantidad de papel reciclado que sale del despacho-.


En el blog Yellow bliss road encontramos el imprimible en dos colores, rojo y verde, para que podáis hacer las bolsitas y las etiquetas. Nosotros hemos hecho la mitad del calendario en verde y la otra mitad en rojo y hemos ido alternando las etiquetas de los planes. Para cerrar el sobre, un poquito de washitape y unas pinzas para colgar el sobre de una cuerda...

La dificultad más que en hacer el calendario es tener preparadas actividades para cada día que además de gustarle a los dos peques (con una diferencia de 4 años, que todo hay que decirlo), sea compatible con el día a día de casa.

Aunque ya os iré contando poco a poco, este año tenemos cuentos de navidad para leer, manualidades y recetas navideñas, salidas en familia...vamos, unos planes estupendos.El año pasado disfrutamos muchísimo con las actividades que teníamos en el calendario de adviento y ojalá este año sea igual; eso sí, como somos bastante golosos en casa, los planes los hemos endulzado con un poquito de chocolate.



martes, 25 de noviembre de 2014

"Arturo y Clementina", un cuento para el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer




Hemos aprovechado que hoy, día 25 de Noviembre, se celebra el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, para leer un cuento en casa que me gusta especialmente "Arturo y Clementina" escrito por Adela Turín y Nelia Bosnia, y que trata sobre esa violencia que no es física y que se ejerce a base de insultos, menosprecios y vejaciones.


Arturo y Clementina son dos tortugas jóvenes que se conocen un día y deciden casarse.  Arturo es quien trabaja fuera de casa, pescando y llevando la comida a casa y Clementina se queda todo el día en casa, encargándose de su cuidad.

Pasa el tiempo y Clementina va mostrando sus deseos a Arturo pero, en lugar de acompañarla y animarla a
cumplir sus deseos, se ríe de ella y la va cargando de cosas materiales, de trastos que no consiguen hacer a Clementina más feliz.

Afortunadamente, llega un día en que Clementina decide dejar atrás todas las cosas materiales que la ataban a su casa y se atreve a dar un paseo sola, sin Arturo. El paseo le gusta tanto que cada día se anima a dar un paseo, un poquito más largo cada día...hasta que llega el día en que Clementina decide dar un cambio radical a su vida.

Me parece esencial que los niños conozcan desde que son pequeños que además de la violencia física existe una violencia psíquica, igualmente grave y que se ejerce a base de insultos, menosprecios y vejaciones y que va minando la autoestima de quien lo sufre.

Si os apetece leer el cuento integramente, os dejo aquí el enlace a la web de la Junta de Andalucía.




domingo, 23 de noviembre de 2014

Ideas para regalar: Una camiseta que es ciudad para dar un masaje




Diseñando la ciudad

La semana pasada fue el santo del padre de mis criaturicas y, desde hacía algún tiempo, tenía al mayor rondándome y preguntándole qué le íbamos a regalar a su padre...Después de decirle un par de ideas que yo tenía en mente, tenemos la siguiente conversación:

- Carlos: "Bueno ese regalo está bien pero yo prefiero hacerle uno que sea más especial"
- Silencio por mi parte (andábamos muuuy justos de tiempo).
- Carlos "¿Te acuerdas de la camiseta que vimos en la revista Clan para el día del Padre?"
-Yo: Sí, claro que sí era muy original.
- Carlos: Pues yo creo que a papá le va a encantar y además, con los coches le vamos a dar un masaje en la espalda que se va a quedar como nuevo.

Y yo, después de semejante argumentación, no tuve otra que agarrar las pinturas de tela, el rotulador negro de tela, una camiseta blanca y un cartón gordito que se coloca entre medias de la camiseta para que la pintura no la traspase.

Pintando detallitos
¡¡No me digáis que los materiales no son fáciles de encontrar!!

Pues la realización es aún más fácil ya que, después de colocar el cartón como os he dicho antes, únicamente se trata de darle las pinturas a los niños para que sean ellos quienes diseñen la camiseta-ciudad a su gusto y coloquen las carreteras, rotondas, parkings, coles y hospitales como y donde quieran.


Recibiendo un masajito
Una vez terminada la camiseta, queda chulísima pero es que además, viene genial después de un día duro ya que, con unos coches pequeños de vuestros hijos, se pueden dar unos masajes estupendos haciendo un poco de presión y siguiendo las carreteras previamente diseñadas.


viernes, 21 de noviembre de 2014

#Hoyleemos: Sapo Manuel Quenorrana






Hace sólo dos días que encontré por casualidad en la estantería de la Biblioteca Municipal de Jaén este libro cuyo título me enganchó desde el primer momento, Sapo Manuel Quenorrana, y que en casa hemos leído varias veces porque nos ha encantado.

En casa nos ha encantado el estilo con el que José Campari va desgranado la historia del Sapo Manuel que vive en una charca con su familia y otros sapos y una princesa que vivía en un palacio con un rey, una reina y muchas más personas.

El caso es que la princesa se pasaba el día llorando y el Sapo Manuel, creyendo que había perdido un anillo, se pasaba las mañanas nadando y buscando ese anillo perdido hasta que un día le preguntó a la princesa y le dijo que no había perdido ningún anillo sino que estaba buscando a un príncipe encantado bajo la forma de sapo para poder besarlo y sacarlo su encantamiento. Por probar, se besaron aunque, como Sapo Manuel
Quenorrana, era un sapo no se transformó en nada; vamos, que se quedó cual sapo.

Pero, para ayudar a su amiga, fue a buscar a una bruja quien le dijo que ella había sido quien había convertido a un príncipe llamado Eugenio en sapo y que vivía en la misma laguna que Sapo Manuel Quenorrana...Casualmente, el padre de nuestro sapo se llama Eugenio, ¿tendrá algo que ver mi padre  con la princesa llorona y con la bruja? Es la pregunta que obviamente se hace el protagonista.

En definitiva,  es un cuento muy divertido y muy recomendable porque puedes ir sacando distintas historias y distintos finales.  Además, las ilustraciones, que son de Inés Vilpi,  son tan bonitas y sugerentes que los mas pequeños también pueden seguir la historia sin necesidad de saber leer. Vamos, que ha sido todo una suerte encontrarnos con este librito que sin duda os recomiendo.