lunes, 16 de junio de 2014
Escapada a Denia: Qué ver y qué hacer con niños
Pues eso, aprovechando que hacía un tiempo fantástico la pasada Semana Santa aprovechamos para hacer una escapada a Denia con los peques. La costa levantina es un lugar fantástico para pasar unos días de descanso y, de eso se trataba fundamentalmente, de descansar que el trimestre había empezado con fuerza.
Pero, claro, tú metes a dos niños de 7 y 2 años en un piso, por grande que este sea, y al cabo del rato está todo el mundo desesperado porque, claro, no es su casa, se aburren y se descontrolan...al menos a los míos les ocurre e imagino que no serán los únicos
Bueno, pues para evitar precisamente que se aburrieran con las visitas, planificamos algunas actividades con ellos que les resultaron muy entretenidas y bueno, yo creo que al final salió bastante bien.
Quizás lo que peor llevaron ellos fueron las horas de viaje en coche (más de seis horas) que fueron una auténtica paliza pero que sobrellevaron bastante mejor de lo que pensábamos...en otra entrada, os contaré cómo nos las apañamos nosotros para que los viajes con los niños sean muy llevaderos.
¿Qué se puede hacer en Denia con los peques?
Lo primero que os aconsejo es que os paséis por la Oficina de Información Turística de Denia ya que han editado un folleto con actividades para hacer con niños en las localidades de la zona y aunque cuando fuimos nosotros no había actividades para ellos, siempre puede ser útil echar un vistazo.
Nosotros visitamos el Mercado Municipal de Denia que es una maravilla por la cantidad de puestos de pescado y frutas que hay. Puede parecer raro pero cuando viajamos con los niños, Carlos siempre pregunta si donde vamos hay mercado porque le encanta el contraste de colores y ver productos que no siempre hay por estos lares...Nosotros de pescado andamos justos así que, lógicamente, nos detuvimos más en esos puestos.
Después de un buen rato caminando, pensamos que sería buena idea que los niños descansasen un poquito así que, como estábamos cerca de la parada del Trenecito turístico y cuadraban los horarios, allá que nos fuimos. A ver, el tren hace dos recorridos diferentes tanto de zonas por las que discurre, como por la duración y el precio. Nosotros hicimos el recorrido del paseo marítimo -en parte porque no sabíamos que había dos recorridos diferentes- y nos costó 3 euros por adulto y 2 euros por niño de más de dos años. Bueno, tanto Carlos como yo esperábamos algo más y la verdad, si hubiéramos sabido que había otro recorrido por la zona monumental lo hubiéramos hecho aunque sea un poco más caro.
Por supuesto, no nos podíamos perder la visita al Castillo de Denia y Museo Arqueológico porque yo no sé los vuestros, pero mis hijos se divierten de lo lindo en los castillos...Os recomiendo que cuando vayáis a visitarlo aprovechéis las primeras horas de la mañana o las ultimas de la tarde, cuando no haga demasiado calor porque la subida se hace durilla sobre todo con los peques pero luego es cierto que las vistas merecen la pena.
El casco histórico de Denia bien merece una visita tranquila y eso fue lo que hicimos, atravesando un antiguo refugio antiaéreo que, a mí personalmente, me sorprendió muchísimo y me acongojó que nos llevó al pleno centro histórico de la localidad. Coincidiendo con la Semana Santa tenían montado un mercado medieval por las callejuelas del centro y le daba un aire entrañable.
Y finalmente, no podíamos dejar a un lado la visita a Las Rotas y las playas. Antes de viajar a Denia leí en varias webs que existía un paseo para ir a Las Rotas andando o en bici pero nosotros lo descartamos totalmente porque el paseo es bastante grande y hubiéramos tenido que llevar a Laura bien en la silla de paseo bien cargada en brazos (y aunque no me importa lo más mínimo, cada vez pesa más y mi espalda se resiente jejejeje) además, viajamos con mi hermana que está embarazada y, bueno, más que disfrutar del paseo podría haber sido una pesadilla. Así que, optamos por ir en coche para que ni los peques ni la tía se cansaran más de la cuenta y así disfrutar más del día.
Las vistas en Les Rotes son una maravilla y bien merece una caminata. Hay una pequeña playita y un restaurante con unos precios bastante moderados aunque como nosotros fuimos por la mañana temprano, no comimos allí por lo que no os puedo decir qué tal se come.
La última tarde dimos un paseo por el barrio Baix la Mar....con sus casitas pintadas de colores, su lonja de pescado y un ambiente estupendo para tomarse una cervecita en una de las muchas terrazas que ponen aprovechando el buen tiempo. Nosotros nos encontramos con la escultura de un Playmobil pirata, donde los niños se hicieron varias fotos pero que no puedo compartir porque la cámara y la tarjeta de memoria se han quedado por el camino...tendremos que volver!!
La experiencia como veis ha sido bastante buena y completa y creo que hemos sabido combinar el ocio adulto con el de los peques y a final, que es de lo que se trata, hemos pasado unos días estupendos.
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seguro que la parte playmobil les sorprendiô! yo no conozco denia pero està bien esta guîa, nunca se sabe...
ResponderEliminarDesde luego fue lo que más le llamó la atención jejeje. La verdad es que Denia es un destino relativamente tranquilo y me alegra que te haya gustado la entrada ^^...os he contado lo que fuimos haciendo, ni más ni menos, y además teniendo en cuenta las opiniones del mayor que me ha salido viajero jejeje
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